El Centro Cultural de Guijuelo, en Salamanca, es sin duda el escenario perfecto para celebrar la primera jornada técnica de porcino ibérico, un evento organizado por el Grupo Interempresas y la revista Tierras Porcino, con el patrocinio de AEVAE, bajo el lema «Digitalización y Monitorización del Porcino Ibérico en España», la jornada atrajo a expertos y profesionales del sector para discutir las innovaciones y tendencias emergentes.
La inauguración contó con la participación de Jesús Manuel Hernández, concejal de Economía y Hacienda de Guijuelo; Pedro Díaz Nafría, presidente de Asacriber; y Lorena Ruiz Ponce, directora de Negocio Agroalimentario del Banco Santander. Víctor Molano, del área ganadera de Interempresas, fue el encargado de moderar el evento.
Aevae con el sector del porcino ibérico
Uno de los momentos más destacados del evento fue la participación de José Vicente Ronda, director general de AEVAE, en la mesa redonda sobre normativa y estándares en bienestar animal y digitalización. Ronda enfatizó la importancia de una gestión adecuada de los envases en el sector porcino, destacando cómo AEVAE promueve prácticas sostenibles y conformes con la normativa mediante el uso de soluciones digitales avanzadas.
Mesa redonda sobre normativa y estándares de bienestar animal
Líderes y profesionales del sector porcino ibérico
La jornada continuó con presentaciones de Alfredo Romero de MSD Animal Health, Borja Fernández-Valladares de Aviporc y Raquel Quintanilla del IRTA. Estas ponencias cubrieron temas como soluciones medioambientales y plataformas digitales para el sector porcino.
La primera jornada técnica de porcino ibérico destacó por su éxito en reunir a líderes y profesionales del sector para discutir el futuro de la digitalización y la monitorización. La intervención de José Vicente Ronda subrayó la relevancia de AEVAE en la promoción de la sostenibilidad y la correcta gestión de envases en el sector ganadero, reflejando el compromiso del sector con la innovación y el bienestar animal.
En resumen, este evento marcó un hito en la evolución del porcino ibérico hacia prácticas más avanzadas y sostenibles, consolidándose como un referente para futuras iniciativas en el ámbito de la digitalización del sector ganadero.