El sector caprino en España

El sector caprino en España ha evolucionado significativamente en las últimas décadas, consolidándose como una pieza fundamental dentro del ámbito agropecuario nacional y europeo. Su capacidad de adaptación a los cambios para una mejora de la gestión de las granjas y su optimización tanto productiva como sanitaria, valiéndose de los medios tecnológicos actuales, lo han convertido en un sector con un futuro prometedor.

Importancia del sector caprino en España y Europa.

España es uno de los principales productores de caprino en Europa, destacándose tanto en la producción de carne como de leche. Ocupa el segundo lugar después de Grecia, país que más animales tiene censados. En cuanto a Comunidades Autónomas Andalucía, Castilla–La Mancha, Extremadura y Canarias son las que en la actualidad producen más carne de caprino en España.

La caprinocultura (cría de cabras) en el país no solo proporciona productos de alta calidad, sino que también es vital para la economía rural, generando empleo y contribuyendo a la sostenibilidad de muchas regiones. Las razas autóctonas, como la Murciano-Granadina y la Malagueña, son reconocidas por su excelente rendimiento y calidad, posicionando a España como un líder en el mercado europeo.

Producción caprina, adaptación y modernización.

Como hemos dicho, al principio la producción caprina en España ha experimentado importantes cambios para adaptarse a las exigencias del mercado y las nuevas tecnologías. En la actualidad, los avances en genética, alimentación y manejo han permitido mejorar la eficiencia y productividad del sector.

• Genética y mejora de razas: La implementación de programas de mejora genética ha sido fundamental para incrementar la producción de leche y carne. Las técnicas de inseminación artificial y la selección genética han permitido desarrollar animales con mejores características productivas y mayor resistencia a enfermedades.
• Alimentación y nutrición: La investigación en nutrición caprina ha llevado al desarrollo de dietas más equilibradas y eficientes, optimizando el uso de recursos y mejorando la salud de los animales. El uso de suplementos específicos y alimentos de alta calidad ha contribuido a aumentar la producción de leche y carne, reduciendo al mismo tiempo el impacto ambiental.
• Tecnología y digitalización: La digitalización ha revolucionado el manejo de las explotaciones caprinas. El empleo de sensores y sistemas de monitoreo permite un control preciso de la salud y bienestar de los animales, así como una gestión más eficiente de los recursos. Las explotaciones inteligentes, que integran tecnologías de la información, están transformando la caprinocultura en una actividad más sostenible y rentable.

Desafíos y nuevas oportunidades para el sector caprino.

A pesar de los avances, el sector caprino en España enfrenta desafíos importantes. La competencia en el mercado global, la fluctuación de los precios y las políticas agrarias son factores que influyen en la estabilidad del sector. Sin embargo, también se presentan oportunidades significativas:

• Exportación y mercados internacionales: En los mercados internacionales la demanda de productos caprinos de alta calidad está en aumento. Es un buen momento sin duda para que España, con su reputación y calidad, no pierda la oportunidad única para expandir sus exportaciones, especialmente hacia mercados asiáticos y americanos, este último con una gran demanda por parte de la población de origen árabe y latina.
• Sostenibilidad y medio ambiente: La creciente conciencia sobre la sostenibilidad y el bienestar animal está impulsando prácticas más responsables y respetuosas con el medio ambiente. El sector caprino en España puede liderar este cambio, adoptando métodos de producción ecológica y promoviendo el consumo de productos caprinos sostenibles. Además, el sector caprino también tiene un valor añadido como “servicio ecosistémico, ya que beneficia a través del pastoreo el control de la vegetación, la prevención de incendios y el mantenimiento de la biodiversidad en espacios naturales protegidos” (Morales et al., 2019).
• Innovación y desarrollo: La continua inversión en investigación y desarrollo es crucial para mantener la competitividad del sector. La colaboración entre instituciones académicas, empresas y productores es esencial para fomentar la innovación y asegurar un futuro prometedor.

Futuro del sector caprino en España.

El futuro del sector caprino en España es prometedor. La combinación de tradición e innovación ofrece una base sólida para el crecimiento y desarrollo sostenible. Ahora y siempre, el enfoque en la calidad, la sostenibilidad y la tecnología será clave para enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades emergentes.

El compromiso con la mejora continua, el bienestar animal y la sostenibilidad ambiental garantizará que el sector caprino en España siga siendo un pilar fundamental de la economía rural y un referente en el mercado global.

Con una estrategia centrada en la innovación y la adaptabilidad, el sector caprino español está bien posicionado para un futuro de éxito y crecimiento sostenido. Es por ello que la transformación hacia una ganadería de precisión que mejore la gestión de los animales, así como lograr aumentar la eficiencia y reducir el impacto ambiental de las producciones agropecuarias, está en marcha de manera imparable.

Otra de las medidas que el sector está implementando es la recogida de envases usados que utilizan para el cuidado animal en sus granjas. Para ello, cada día más productores/as se adhieren a Aevae que, como Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP) del sector agropecuario, les garantiza la recogida, transporte, almacenamiento y valorización de distintos envases usados como son botellas y garrafas de plástico rígido, palets, cajas de cartón, ibcs, sacos de papel y plástico flexible… para darles un tratamiento medioambiental correcto.

Con ello, el sector caprino en España está listo para enfrentar los desafíos del mercado global y aprovechar las oportunidades de innovación y sostenibilidad. Con un enfoque estratégico y un compromiso con la calidad y el bienestar animal, el futuro es sin duda, brillante y prometedor con un cambio generacional que sin duda ayudará al sector a un mayor crecimiento lleno de dinamismo y capaz de enfrentar los desafíos de un mercado global cada vez más exigente.